La verdad al costado del camino, sin dejarse llevar, gran cosa. Me ha gustado esta poesía, que no se deja llevar por el viento. Besos.
Acabo de aterrizar, por casualidad, en tus pensamientos . Molas un montón. Ester
Y es que los caminos de hierro son inmutables y no dejan que nuestros sueños rielen en cualquier otro lugar.
hoy no eres nómada?
Me quedo a tu lado, a soñar y observar el mundo al arrullo del viento entre las hojas ;)
Todos necesitamos muelles de vez en cuando, aunque estén hechos de aire y volutas de niebla.
Los rieles están concebidos para las verdades de alta velocidad, ésas que no deseamos analizar, detenernos en ellas, escucharlas, quererlas de algún modo.Para saber, hay que detenerse.Besos.
El arraigo... que diría otro.
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La verdad al costado del camino, sin dejarse llevar, gran cosa. Me ha gustado esta poesía, que no se deja llevar por el viento. Besos.
ResponderEliminarAcabo de aterrizar, por casualidad, en tus pensamientos . Molas un montón.
ResponderEliminarEster
Y es que los caminos de hierro son inmutables y no dejan que nuestros sueños rielen en cualquier otro lugar.
ResponderEliminarhoy no eres nómada?
ResponderEliminarMe quedo a tu lado, a soñar y observar el mundo al arrullo del viento entre las hojas ;)
ResponderEliminarTodos necesitamos muelles de vez en cuando, aunque estén hechos de aire y volutas de niebla.
ResponderEliminarLos rieles están concebidos para las verdades de alta velocidad, ésas que no deseamos analizar, detenernos en ellas, escucharlas, quererlas de algún modo.
ResponderEliminarPara saber, hay que detenerse.
Besos.
El arraigo... que diría otro.
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